Curetas Universales
Instrumento periodontal con bordes cortantes afilados que se unen en una punta redondeada, usado principalmente para el raspado subgingival y el alisado radicular. Las curetas universales reciben este nombre porque su diseño permite que se adapten a todas las áreas de la cavidad oral.
Usos Al igual que el resto de las curetas, las universales se usan principalmente para el raspado subgingival y el alisado radicular. Pueden usarse también para el raspado supragingival, especialmente en la zona cervical, y para el curetaje gingival.
Diseño Tal como sucede con las hoces, en un corte transversal se observa que las curetas universales poseen una cara plana, que se curva en sentido longitudinal. Las superficies laterales se unen a la cara formando dos bordes cortantes paralelos. Sin embargo, a diferencia de las hoces, los bordes cortantes de la cureta universal se unen formando una curva, no una punta afilada. Otra diferencia entre la hoz y la cureta universal radica en el dorso de la hoja es redondeado. En un corte transversal, la hoja posee forma de medio círculo. Otras características son similares a las de las hoces. Las curetas universales son de extremo doble y pareado, con extremos que son imagen en espejo entre sí, y el tallo en contraángulo. Un extremo se adapta a las superficies linguales y el otro a las vestibulares. La cara del instrumento forma un ángulo de 90 grados con el tallo terminal.
Técnica
Extremo de Trabajo Correcto. Como sucede con las hoces, en la mayoría de las curetas universales de extremo doble se identifica cada extremo con un número. Sin embargo, si se utiliza una cureta universal que posee sólo un número de identificación, los extremos derecho e izquierdo se determinan tal como se describió para las hoces.
Borde Cortante correcto. Al igual que la hoz, la cureta universal posee dos bordes cortantes, el borde interno y el borde externo. Estos bordes se identifican de la misma manera que los de las hoces, y se adaptarán igual a las superficies del diente. Si se adapta el borde cortante incorrecto, la cara de la cureta mirará hacia el clínico y traumatizará los tejidos gingivales.
Angulación de la hoja. El borde cortante se sitúa sobre el diente de manera que la cara forme un ángulo de 45 a 90 grados con la superficie dentaria. El tercio más extremo del lado de trabajo se adapta a la superficie del diente. Esta porción del instrumento debe permanecer en contacto con la superficie dentaria durante toda la instrumentación.
Inserción. Con la prensión de lápiz modificada, establecer el fulcro tan próximo como sea posible a la zona de trabajo. Empezar en la línea ángulo distal en los sextantes posteriores o en la línea ángulo más alejada del clínico en los anteriores e insertar la hoja con un ángulo inferior a los 45 grados, con la punta dirigida apicalmente y en la dirección del movimiento. Con un movimiento exploratorio, situar la punta apical al depósito, abrir el ángulo de la hoja de 45 grados a 90 y, cuando se dapta el borde externo a las usperficies vestibulares, linguales o mesiales (superficies dirigidas hacia el clínico en los sextantes anteriores), el mango del instrumento debe ser aproximadamente paralelo al eje longitudinal del diente: Cuando se adapta el borde interno a la superficie distal ( a la superficie proximal más alejada del clínico en los sextantes anteriores), el amngo debe ser aproximadamente paralelo al plano oclusal.
Movimiento. Usar uan serie de movimentos de tracción cortos y superpuestos, aumentando la presión lateral a medida que sea necesario. Aunque el movimiento es una combinación de empuje y tracción, el de empuje es un movimiento exploratorio y debe ser suave. En las superficies vestibulares y linguales, se usa un movimiento oblicuo. En las proximales un movimiento vertical. A veces puede ser necesario un movimiento horizontal. Una vez se ha eliminado el depósito, se usará un movimiento de alisado radicular más largo para conseguir una superficie lisa.